top of page

Sindy

Sindy nos cuenta sobre su vida y su experiencia en Casa Sofia

1. Mi nombre es Sindy Lorena Jacinto Borja, nací en aldea El Carrizal, San Jacinto Chiquimula. Soy la 6ta. hija de Gumercinda Borja y Manuel Jacinto, tengo 1 hermano y 4 hermanas. A la edad de 13 años culminé sexto primaria, en ese mismo año falleció mi papá. Sin embargo, mi mamá me apoyó moral y económicamente para que continuara mis estudios.

A los 17 años viajé a la Ciudad de Guatemala, para continuar mis estudios de nivel diversificado en el Centro de Formación La Preciosa Sangre. Dicho centro de estudios fue fundado por Hna. Mary Faye Hellman y apoyado por la congregación religiosa “Sisters of the Precious Blood”.

​

2. En el año 2014, conocí a Hna. Joyce Kahle y Hna. Theresa Walter, miembros de la congregación “Sisters of the Precious Blood”, fundadoras del proyecto “Casa Sofía”, dicho proyecto apoya con hospedaje, recurso técnico y alimentación a señoritas provenientes de áreas rurales del país, que desean continuar sus estudios universitarios. Mi deseo era continuar con mi formación académica, por lo que solicité ser parte del proyecto, ingresé el 28 de septiembre del año 2015 y egresé en el año 2022.

 

3. Estudié la Licenciatura en Trabajo Social, en la Universidad de San Carlos de Guatemala. Decidí estudiar dicha carrera, porque me conmocionó conocer los índices de pobreza y desigualdad de oportunidades que se vive en Guatemala, siendo la más desfavorecida la población de áreas rurales. Por lo que consideré que, desde la Profesión de Trabajo Social, podría aportar a través de la concientización de derechos, impulsar la organización y participación comunitaria.

 

4. Mi estancia en “Casa Sofía” fue fructífera, aportó significativamente a mi crecimiento académico y personal.

 

5. “Casa Sofía” me apoyó con un espacio digno para decidir, me sentí en familia, segura, responsable de mi formación personal y académica.

 

6. Al estar en “Casa Sofía” aprendí a convivir y respetar la diversidad cultural-personal. Reconocer-respetar en mí y en las/los demás la dignidad que se tiene como persona. Practicar la sororidad, empatía, apertura los nuevos procesos de vida y sana convivencia con las compañeras residentes.

 

7. Me siento agradecida con Dios, porque se ha manifestado en diferentes formas y personas que acompañaron y fueron parte de este proceso de formación profesional y personal. También me siento comprometida a compartir, transmitir lo que he aprendido, para que más personas se beneficien de lo que yo he recibido y aprender también de ellas.

 

8. El vivir en un apartamento es un reto y una oportunidad. Reto, porque hay distanciamiento de “Casa Sofía”. Sin embargo, es una oportunidad para estar con una misma, socializar con nuevas personas o grupos y ser responsable financieramente, esto aporta al crecimiento personal.

 

9. Deseo que las mujeres de las áreas rurales crean en la capacidad que tienen, que pueden hacer grandes cambios en su vida y en el mundo. Los sueños inalcanzables no existen, porque si lo sueñan es porque son capaces de alcanzarlos. La clave está en dar el primer paso, en priorizar por la formación académica y personal. Que el miedo a lo diferente sea señal de impulso, para aventurarse a vivir la vida y aprender de ella.  

bottom of page